Fiestas, tradiciones, actividades al aire libre, experiencias, rutas, manifestaciones culturales, gastronomía, restaurantes y alojamientos componen la primera guía de turismo rural de Quito.
Herramienta digital
La herramienta digital se lanzó en la Hacienda Jimenita, en Pifo, uno de los 959 establecimientos registrados en la propuesta. La guía se encuentra en la página visitquito.ec y en la aplicación Visit Quito.
La guía, titulada “Aquicito” y elaborada por Quito Turismo, la agencia municipal metropolitana de promoción turística de la ciudad, ofrece una hoja de ruta para conocer las 33 parroquias rurales que componen el área metropolitana de la capital ecuatoriana.
La reactivación económica y potenciar los atractivos de la ruralidad quiteña es la propuesta desde Quito Turismo. Cristina Rivadeneira, gerente de Quito Turismo, dio cuenta de que, en la ruralidad, el turismo representa 5.246 empleos.
Conservación
En la Hacienda Jimenita, por ejemplo, trabajan 18 personas. En el sitio también le apuntan a la conservación, con una reserva de 150 hectáreas, en la que se han identificado 90 especies de aves.
Daniel Cruz y Jimena López son los propietarios de la hacienda. En el establecimiento, además de hospedaje y gastronomía tradicional, ofrecen recorridos para, además, con conocer especies nativas de flora y fauna.
La gastronomía es otro de los atractivos que se difunden a través de la guía. En la presentación de la herramienta, Luis Maldonado, Quique Sempere y Alejandro Huertas, chefs reconocidos, hicieron una demostración de algunos platillos con productos de la zona.
Rutas
Entre las rutas sugeridas están: Tulipe–Rumisitana, Explorando el bosque nublado, El Quinche–Guayllabamba, Senderismo en Pahuma, Entre lagunas y páramos, Centro del mundo, Ruta Escondida, Culuncos de Yunguilla y Maquipucuna.
Con la iniciativa se han realizado capacitaciones a la comunidad, implementación de señalética y material con información turística. La guía está disponible en formato digital y cuenta con un mapa interactivo con cerca de mil establecimientos turísticos situados en las zonas rurales de Quito.
Rivadeneira, manifestó que impulsar el turismo de las áreas rurales fortalece a las parroquias para que tengan una fuente de ingresos vitales y contribuye a la generación de empleos y la diversificación de la economía local, además de ayudar a preservar la cultura, historia y tradiciones, y generar “un impacto positivo en la educación, salud e infraestructura de las comunidades”.
La funcionaria indicó que las actividades que propone la guía son diversas, como el senderismo, la bicicleta de montaña, los balnearios y el avistamiento de aves, entre otras, en lugares que, en su mayoría, están a máximo una hora de distancia de la ciudad.